Brightburn (2019)

CRITICA: La visión de un Superman mocoso y malvado ha resultado. Esta producción de James Gunn junto con la dirección de David Yarovesky, el director de The Hive, retrata de manera malsana como sería un ‘Clark Kent’ niñato y perverso.

Lo bueno de Brightburn es que no es una película demasiado obvia en perfilar al niño Brandon Breyer como simplemente malvado. En realidad, no sabría si catalogarlo así, o si simplemente fue diseñado con un propósito al ser enviado a la tierra. En este caso, la película es ambigua y cada quien puede pensar lo que quiera y dar su propia interpretación, de hecho, uno de los puntos más interesantes de Brightburn, es que quizás todo podría haberse evitado y terminar de una manera menos trágica. Ya que existe una lucha interna entre el bien y el mal que se decanta hacia un lado por algunas decisiones.

La película es ‘pequeña’ comparado con lo que tenemos hoy de Superman de DC, aquí se centra en la niñez de este ‘supervillano’ y el nacimiento de unos poderes sobrehumanos cuando está alcanzando la pubertad. Poco a poco vemos los cambios en la actitud del niño, para peor, con algunas que otras escenas que se vuelvan cada vez más tensionantes.

Si, efectivamente hay muertes y es una película sangrienta, como tiene que ser sin demasiada censura. Brightburn nos regala algunos momentos muy interesantes en este aspecto. Quizás, lo que hubiese estado genial, es haber desarrollado un poco más la parte ‘sexual’. No sabemos si aquí hubo censura de algún tipo, pero la película sugiere cosas con este tema que nunca llegan o no se ven en la película. Anyway.

En cuanto a las actuaciones, Elizabeth Banks es una garantía de una buena actuación siempre, no así David Denman como su marido, nunca me creí nada de lo que estaba actuando. Sin embargo, Jackson A. Dunn hace un protagónico muy interesante como Brandon Breyer. Realmente impone con su actuación y ya de por si tiene cara de loco, así que es perfecto para el papel de este mocoso futuro supervillano destructor de mundos y esclavizador sexual de galaxias.

Los efectos especiales son muy buenos y la dirección de David Yarovesky sorprende, sin entrar en exageraciones, la película tiene un buen desarrollo y una duración que es la justa. En ningún momento se hace pesada ni entra en baches.

El final de la película, nuevamente nos regala algunos de los mejores momentos del film, y puede que algunas de las mejores escenas del año en el género del terror que tanto amamos.

El único defecto que le podría encontrar es que no se desarrolla tanto la parte ‘dramática’ de la cinta, o lo hace de manera demasiado apresurada para ir a lo ‘importante’. Es le quita algo de cuerpo, pero es lo único que podríamos encontrar como defecto de un film casi redondo.

Brightburn es una pelicula que hay que ver, de lo mejorcito que vamos a ver este año seguramente. A verla con confianza. Un saludo a todos y nos vemos en la próxima.