Wilkolak (2018)

CRITICA: Una párvula de niños, y algún que otro adolescente, van a parar a una casa retirada en los bosques, donde prácticamente son abandonados a su suerte.

Realmente no podía despedirme del año 2019 sin ver este film polaco, que en el papel se antojaba muy interesante, pero que ha quedado un poco a deber.

Lo bueno de Wilkolak llega de la mano de las interpretaciones y de como se las arreglan para sobrevivir sin agua ni alimento. La película puede ser un tanto ‘desgarradora’ en este aspecto, aunque los niños no parecen muy conscientes de esto. La película no pretende dar el golpe bajo, aun cuando podrían haberlo hecho, jugando con la desesperación por encontrar comida, mientras están encerrados por culpa de una jauría de perros nazis. Sin embargo, el tono de la película es bastante neutro, y es aquí donde empiezan algunos problemas.

El film desaprovecha situaciones para añadir mayor tensión y suspenso del que tiene. Es como que no se decide a explotar realmente y tiene mucho miedo de mostrar hemoglobina que estaba completamente justificada.

Esto no quiere decir que no tenga esa tensión y suspenso, la tiene, tiene a esos hermosos ovejeros muy bien amaestrados, donde logran algunas escenas bien orquestadas y también a un personaje que todos odiaremos con fuerza, pero falto más power, el director Adrian Panek necesitaba un petardo en el culo para darnos lo que veníamos a buscar.

Técnicamente, como siempre, el cine europeo sabe de fotografía y de colocar bien la cámara, no tengo ninguna queja en este aspecto. Lo que mas me gusto, particularmente, fueron algunas escenas con los perros, que seguramente requirieron muchas tomas para que queden bien.

No me quiero alargar demasiado, no va a pasar a la historia, es más, probablemente te olvides que alguna vez viste esta película de origen polaco. No esta mal, tiene sus momentos, esta bien actuada, pero esperaba un protagonismo mayor de esas criaturitas en 4 patas. Un saludo a todos y nos vemos en la próxima.