A QUIET PLACE (2018)

CRITICA: John Krasinski actúa y dirige esta película de terror y ciencia ficción en donde todo lo que podría haber salido mal para una pobre familia, efectivamente salió mal, y eso para nosotros solo significa una cosa, peliculón.

A Quiet Place ya tenía algo a favor incluso antes de verla, la trama daba mucha curiosidad, había ganas de verla, y se puede decir que en este aspecto no decepciona, no engaña, lo que esperabas es lo que obtienes y las distintas situaciones parecen aprovechar muy bien la temática.

Un mundo sumido en el terror más absoluto por unas criaturas que atacan cualquier cosa que haga ruido, una familia que tiene que vivir en absoluto silencio en una granja, tres niños, y una mujer a punto de dar a luz, estaba perfectamente orquestado para que todo se vaya a la mierda.

Lo primero y clave de A Quiet Place es el equilibrio perfecto entre los personajes bien construidos, el drama de la situación y las escenas más terroríficas. Un miedo que había con esta película es que se volviese demasiado dramática y melancólica, después de todo, vivir en silencio y con extremo cuidado de no hacer ningún ruido debe ser horrible y eso se siente en cada acción de los personajes, pero la película de Krasinski no se pasa de rosca con estos elementos, y cuando tiene que mostrar y ponerte la piel de gallina, lo hace.

Todas las situaciones que ponen en peligro a los protagonistas están bien aprovechadas, el terror y la tensión se palpan en el aire, todo lo que podía salir mal está pasando y el film gana en ritmo a medida que pasan los minutos. Es como que va in-crescendo. Pero incluso cuando la pelicula no quiere dar miedo, el film tambien puede ser enternecedor en ciertos momentos.

Una parte fundamental son las actuaciones, sobretodo la de Emily Blunt. Sin miedo podría decir que esta es una de las mejores actuaciones de Blunt en mucho tiempo por lo exigente que es el papel y por como transmite todo el terror y el suspenso. Krasinski también esta fenomenal y generan un buen tándem con su cónyuge. 

Técnicamente no hay mucho para reprochar, Krasinski dirige bien, buena fotografía, encuadres y efectos especiales que no desentonan, así como el uso de las melodías en los momentos más álgidos.

El único reproche que podría haber con A Quiet Place es que es tan buena en determinado momento, que te deja con ganas de más. Cuando hay películas a las que le sobran minutos, probablemente a esta le estén faltando diez minutos adicionales, y no lo digo por el desenlace, sino alguna que otra escena más de tensión para dejar completamente satisfecho.

Con el anuncio de la secuela, es probable que conozcamos más sobre el origen de todo esto, que aquí no se explica. Esto no es algo negativo ni positivo, de hecho, muchas sagas comenzaron de esta manera (Cloverfield for example), con una primera entrega que no explicaba nada, y casi que lo agradecería para mantener el misticismo.

¿Por qué A Quiet Place es tan especial? Si tuviera que resumirlo en pocas palabras, diría que, por tener una trama original, imaginativa en cierto punto e inteligente para saber aprovecharlo, suma una buena dirección, efectos y la fuerza de sus caracteres para emocionar y para hacerte sentir el terror mas absoluto en sus rostros, y listo, ahí tienes una de las mejores películas de terror que vas a ver este año. Un saludo a todos y nos vemos en la próxima amantes del horror.